LUIS CARLOS BRAVO
San Luis Río Colorado, Sonora.- En la ausencia de una clínica de salud mental para mujeres en la ciudad, al menos dos centros de rehabilitación se han profesionalizado para poder atender a este sector tan vulnerable de la sociedad.
Uno de estos centros es Sembrando Amor (CERSEA), que actualmente brinda atención a más de una veintena de mujeres que, por diversas razones, han caído en el mundo de las adicciones o, como consecuencia de violencia intrafamiliar, enfrentan problemas de salud mental que requieren monitoreo las 24 horas del día.
El licenciado Daniel López Pacheco, director del centro, destacó la correlación significativa entre la salud mental de las pacientes y el uso de sustancias ilícitas. En el CERSEA se abordan ambas problemáticas de manera integral.
“Por lo regular, una mujer que presenta un cuadro grave de salud mental es víctima de violencia en casa, principalmente por parte de su pareja. En la mayoría de los casos, hay drogas involucradas, que al final se convierten en una opción para ellas. Es una situación muy triste, pero real, y a partir de esa realidad trabajamos”, declaró.
Sin embargo, López Pacheco enfatizó que, aunque algunos problemas suelen ser el principal detonante que lleva a las mujeres a buscar refugio, la atención debe ser personalizada.
“Cada mujer que ha sufrido violencia tiene características diferentes. Algunas han experimentado violencia psicológica, lo que puede llevar a problemas psicológicos más graves que las secuelas de la violencia física. Por eso, la atención debe ser particular e integral, incluyendo apoyo psicológico, psiquiátrico y espiritual”, explicó.
El Centro de Rehabilitación Sembrando Amor ofrece tratamientos de cuatro meses o más para mujeres con problemas de adicción a sustancias ilícitas o medicamentos que requieren control, así como para aquellas que presentan problemas de salud mental.
Entre los servicios que ofrece se encuentran tratamientos profesionales, consejería en adicciones, atención psicológica y psiquiátrica, atención médica, doctrina cristiana, hospedaje, alimentación, talleres de emprendimiento y la oportunidad de concluir sus estudios básicos de primaria, secundaria y preparatoria.
